“El principio de Arquímedes”, escrita por Josep María Miró y Eva Vallines Menéndez, es una potente obra que interpela al espectador desde lo cotidiano, cuestionando los límites de la confianza, los prejuicios sociales y los miedos contemporáneos. Todo comienza con una escena aparentemente inocente: un entrenador de natación abraza y besa a un niño que no quiere lanzarse al agua sin flotadores. Este simple gesto, cargado de ternura, se transforma en un hecho inquietante cuando los padres comienzan a mirarlo con temor.


Ambientada en una piscina en algún barrio de la ciudad de Córdoba, la historia gira en torno a Joaquín, entrenador del grupo infantil “Los caballitos de mar”, y Ana, directora del club de natación, quienes enfrentan la creciente tensión ante las denuncias y reclamos de los padres. Junto a ellos, aparecen
Héctor y David, dos figuras clave para profundizar los dilemas morales, las dudas y las contradicciones que emergen en este conflicto.

A partir de este punto, se despliega un drama que atraviesa la psicología de los personajes y del público, poniendo en jaque nuestras certezas. La estructura no lineal del texto intensifica la tensión y profundiza la ambigüedad, revelando distintos puntos de vista y advirtiendo cómo las acciones generan consecuencias que, como en el principio de Arquímedes, tarde o temprano salen a flote.


Una de las grandes virtudes de la obra es que no ofrece respuestas cerradas: propone preguntas y abre grietas. Cada espectador, al igual que cada actor social involucrado en la historia, construye su propia interpretación desde su subjetividad, influido por su rol, sus valores, sus miedos y sus experiencias.


Así, las “verdades” que emergen no son absolutas, sino múltiples, fragmentadas y, muchas veces, contradictorias. Con pinceladas de thriller psicológico y una fuerte carga emocional, El principio de Arquímedes invita a reflexionar sobre cómo se construyen las realidades individuales y colectivas en una sociedad atravesada por el miedo. Josep María Miró Coromina (Prats de Lluçanès, Barcelona, 29 de julio de 1977) es uno de los dramaturgos más destacados de la escena contemporánea española. Sus obras, como Nerium Park, Gang Bang y El cuerpo más bonito que se habrá encontrado nunca en este lugar, han sido traducidas a múltiples idiomas y representadas en todo el mundo.


Eva Vallines Menéndez es gestora cultural, productora, directora y dramaturga, con una reconocida trayectoria en la escena española. Su trabajo junto a Miró en esta obra potencia la mirada crítica y sensible sobre las tensiones sociales contemporáneas.
En esta oportunidad, la dirección está a cargo de Estefanía Kiessling, quien propone una puesta en escena íntima y tensa, donde el espectador se convierte en testigo y juez.